Llamamos reforestación al hecho de repoblar un territorio con árboles, que en su pasado estaba poblado de bosques que fueron deforestados por diversos factores naturales como los incendios u otros desastres provocados por la naturaleza. (Sánchez, 2020).
La reforestación es importante para combatir el cambio climático, puesto que ayuda a la captura del CO2 y a la reducción del efecto invernadero, también al aumento del recurso hídrico y a la mejor del paisaje; Para llevar a cabo la reforestación de conservación, lo recomendables es usar especies nativas de la zona a intervenir.
Al respecto cabe mencionar que los árboles regulan el clima, ya que son un medio de refrigeración natural, contribuyen a las corrientes subterráneas y el mantenimiento de los ríos, reducen la polución acústica en las vías que mantiene un alto tráfico de automóviles así mismo cumplen un papel importante en la conservación de la flora y fauna silvestre.